Más de una de cada dos personas hoy en día
declara tener piel sensible. Ya sea temporal o permanente, la sensibilidad cutánea se manifiesta con señales invisibles (como la sensación de “piel tirante”, falta de confort, ardor o cosquilleo), a veces acompañadas de enrojecimiento, irritación, inflamación, hasta rosácea o cuperosis. No te preocupes, Rhea Cosmetics está aquí para contarte
cómo cuidarla. Piel enrojecida: ¿de qué se trata?
¡Empecemos por lo básico!
La piel enrojecida se considera un trastorno inflamatorio: la piel reacciona de forma desproporcionada a ciertos factores desencadenantes – internos o externos – que percibe como una amenaza, como el estrés, intolerancias alimentarias, cambios hormonales, o cambios de temperatura, contaminación, exposición solar… Al estar expuesta a estos factores, que son demasiados como para listar todos, los vasos sanguíneos se dilatan, las terminaciones nerviosas de la epidermis se activan y se siente una sensación desagradable de calor: el enrojecimiento suele ser temporal pero, si no se cuida bien, con el tiempo puede volverse persistente debido a la dilatación cada vez más marcada de los vasos sanguíneos.
Cualquier tipo de piel puede enrojecerse, ya sea seca, grasa o mixta, y no debemos subestimar las implicaciones psicológicas: estos enrojecimientos causan preocupación, ansiedad, impaciencia, actitudes defensivas e incluso vergüenza por no cumplir con los estándares ideales de belleza que la sociedad impone. A nivel epidérmico, un papel fundamental lo tiene la
barrera lipídica, que protege la piel reteniendo la hidratación y bloqueando los agentes irritantes externos. En pieles sensibles, la barrera cutánea está alterada tanto en calidad como en cantidad: esta debilidad hace que la piel sea más vulnerable a factores ambientales y sustancias irritantes, causando enrojecimientos, irritaciones, picor y descamación.
Hidratar es la clave para mantener una barrera lipídica saludable, así como proteger la piel de los rayos UV cada día. Y elegir cosméticos formulados
para atenuar la hipersensibilidad cutánea y combatir la fragilidad de los capilares es la mejor manera de decir adiós a la piel enrojecida y reactiva.
Cómo cuidar la piel sensible.

Para devolver confort y alivio a la piel sensible es necesario cuidarla cada día. Por eso Rhea Cosmetics ha desarrollado
RedRescue, el nuevo tratamiento dirigido anti-enrojecimiento facial. Una emulsión para tratar localmente los enrojecimientos e inflamaciones: los activos calmantes y suavizantes actúan sobre el enrojecimiento y los capilares visibles, mientras hidrata, protege y fortalece la barrera cutánea, reduciendo las sensaciones de picor o cosquilleo y devolviendo comodidad a la piel.
Testado dermatológicamente en piel sensible. Descubre todas sus propiedades. Combina RedRescue con
una rutina de cuidado personalizada para piel sensible: - Limpieza: usa un limpiador facial suave, calmante y emoliente, como SenseClean o WonderWater, que mantenga la piel hidratada.
- Calmar y suavizar: con una crema diaria como LeniCream o Aqua[mi], que hidrate el rostro respetándolo al máximo. Añade unas gotas de nuestro booster calmante, B-Dose IV, para potenciar su efecto.
- Protección solar: protege la piel del sol sea cual sea la estación con fórmulas preventivas y reparadoras, con efecto descongestionante, como SOS UV Repair.
Encuentra ya el centro Rhea más cercano y confía en la asesoría personalizada de tu Dermotecnóloga®.